martes, 23 de agosto de 2016

No, tú no sirves para bailarina

Hace tiempo, leí este cuento en alguna parte y me influyó de manera profunda... Me enseñó el verdadero sentimiento de superación personal y cómo la seguridad en uno mismo es lo único que puede cambiar tu vida, que puede aparecer un maestro maestra que te guíe y dé luz en el camino, pero que es uno mismo quien tiene que creer en sus posibilidades y crear su propio destino y construir un camino día a día hasta llegar a él.
Si quieres, puedes, pero solo te pido que quieras, que quieras con todo el alma, hasta que empiece a tomar forma, color, sabor y aroma...